lunes, 2 de julio de 2007

Sabado 30 de Junio

entonces nos habiamos quedado en el día que fuí a Huacachina. Las holandesas ya se han ido a Paracas cuando me despierto. recojo los bartulos y bajo a recepción, Me voy a hacer una foto con vosotros, les digo a Silvia 'la negocianta' y al chico de recepción. Que sí que os la mando (esta vez como llevo libreta de viajante me apunto los recados de enviar fotos y esas cosas que de otra forma se olvidan). Desayuno, que bueno el jugo de piña. 3 soles me vale el bus a Ica y 5 soles el taxi que luego hay que coger para ir al oasis de Huacachina, así son aquí las cosas. Explico: esta zona de Perú es puro desierto de arena, amí me recuerda mucho al sur de Marruecos, sobre todo cuando ves las aldeas de adobe y un camión que surca una pista de arena dejando una hilera de polvo.
Dije que Huacachina es un lugar de otro planeta. Bueno no es para tanto, al cabo de unas horas asimilas que sí es real. Imaginaros un oasis en mitad de un desierto en un país de sudamerica y que el lugar sea una meca de turismo isrraelí. Con sus palmeras y su laguna, repleto de hostels para turistas jovenes con ganas de juerga, musica a todo trapo y boogies que parten cada 10 minutos cargados con gente joven de medio mundo. Por supuesto los peruanos locales también viajan a qui a pasar su particular 'finde', familias se hacen fotos que luego ocuparan estanterias, y cómo decía intentad combinarlo con isrraelies venteañeros fumados, japoneses de tres toneladas haciendo barbacoas a las 10 de la mañana, y más guiris de otros pelajes (nosotros interpretamos el termino 'guiri' por americanos, britanicos, alemanes y ese gremio). Los hostels con su jardin y piscina, restaurante de madera de bambú, pizzas y hamburguesas que no falten y mucho, mucho jaleo. El mío es el Carolas y como curiodad tiene una vidriera con la estrella de David y desayuno isrraelí en su carta. La misión principal del viajero que llega allí es la de subirse a un boogie y tirarse con una tabla de sandboard made in Peru allá dónde le dejen. Pues va a ser que yo paso, será que estoy mayor pero no me motiva el tema. Y como me paso el día sin rumbo por ese bendito oasis rodeado de dunas gigantescas, leyendo y jugando con el monito del hostel pues decido subir a ver la puesta de sol a lo alto de la duna. Ya teneis fotos de lo bonito y lo grande que es ese desierto y lo cerca que esta de la ciudad confiriendo un efecto más irreal al sitio. Me tiro corriendo duna abajo y al llegar abajo entablo conversación con Sian, amiga de Linda que habla español.
Llegado este punto he de aclarar que lo de coincidir más con viajeras que con viajeros se debe a que efectivamente viajan mucho más las mujeres, por lo menos por esta zona y en este 'formato' de viaje. Hay una gran cantidad de grupos de chicas (sobre todo de dos) que hacen su viaje de varios meses por sudamerica. Entonces Linda de Holanda enamorada de España que baila flamenco y todo, y Sian de Inglaterra, me hablan de su viaje desde Argentina y yo de que voy de voluntario voluntarioso. Cenamos juntos y tenemos en placer de compartir la mesa con Beto, el capo de la comida para perros. Y como abuen capo le rodean sus secuaces y dos chicas, Sara y Rocio, delgadas buen tipo, modernas y liberales ellas. Beto dice que no come verdura, gana 100.000 dolares y por eso es un campeón en Perú, y fuma mucha marihuana. 'Puta, huebón, si viajas solo eres un pahero'. Huyamos!. Había quedado con Elke y Thomas porque había una actuación de música del Peru negro pero no les vemos. Luego a la vuelta a nuestro hostel nos los encontramos y tomamos la última.

No hay comentarios: